En este nuevo artículo desarrollaremos toda la información sobre el coral, una especie marina perteneciente a la clase Anthozoa y al filo Cnidaria.
El coral marino es un animal colonial. Las colonias de los corales se componen de miles de individuos zooides, estos llegan a alcanzar grandes dimensiones.
Estas especies son pequeños pólipos de apenas unos pocos milímetros de diámetro. Poseen la capacidad de asentar sobre sus tejidos el calcio que se encuentra disuelto en el mar y así formar estructuras rígidas que los caracterizan.
La estructura calcárea de estas especies es blanca, los diferentes tonos que presentan se deben a la simbiosis que tienen con unas microalgas, estas reciben el nombre de zooxantelas. Es por esta razón que necesitan los corales de aguas transparentes para poder desarrollarse, y así las zooxantelas realicen la fotosíntesis.
El coral es carnívoro, su alimentación se basa en zooplancton.
Encontramos en estas especies varios tipos de reproducción, la sexual, la asexual y existen corales que poseen ambas formas reproductivas. Todas a la vez son expulsadas las células sexuales al mar. La fecundación del coral es externa, la puesta de huevos es tan grande que llegan a cubrir las aguas. Muchos de estos huevos son el alimento de los peces, pero al ser tanta cantidad de ellos, la mayoría sobrevive.
Con el paso del tiempo los pólipos de coral mueren, pero se mantienen las estructuras calcáreas, las cuales suelen ser colonizadas por otros pólipos. Estos pólipos crean estructuras cálcicas de generación en generación. A lo largo de miles o millones de años se forman enormes estructuras calcáreas que son conocidas como los arrecifes de coral.
El hogar de varios organismos marinos lo forman los arrecifes coralinos, es en estos arrecifes en donde muchas especies encuentran el alimento y la protección de los depredadores.