La raza de gatos de la cual hablaremos en esta oportunidad posee un origen desconocido, aunque es muy probable que proceda de Etiopía y posiblemente es uno de los descendientes del gato sagrado de Egipto. A continuación desarrollaremos la información sobre el gato abisinio, una de las razas más antiguas que existe del gato domestico.
La selección y la cría del gato de esta raza se inicio a mediados del S XIX con ejemplares de gatos con un pelaje similar al de las liebres, es por esta razón que en sus inicios el gato abisinio era conocido como “Bunny cats”. La primera presentación de la raza Abisinio data de 1871 en Inglaterra.
El gato Abisinio es una raza que cuenta con una figura estilizada. Es musculoso y ágil; esto se debe a la intensa actividad que caracteriza a esta raza. Las extremidades son delgadas y largas; mientras que en su cola se observa un intenso pelaje, que se afina en la punta.
La cabeza del gato Abisinio es fina con un mentón firme. Las orejas se encuentran separadas y son grandes. En cuanto a sus ojos con forma de almendra podemos observar ejemplares con ojos verdes, marrones o amarillo.
Es un gato muy cariñoso y dócil; además es poseedor de una energía incansable. El gato Abisinio es ágil, tremendamente sociable, juguetón, curioso y cuenta con una gran inteligencia.
El Abisinio es tan sociable que no soporta bien la soledad, siente una especial predilección por las personas más débiles del hogar. Lo que más le gusta a esta raza es recibir caricias, además es muy sociable con otros animales. Es un gato perfecto, pero se adapta demasiado mal a una vida sin libertad, es por ello que necesita de un hogar grande con acceso al exterior.
Al ser una raza muy activa necesita un alimento que le pueda aportar toda la energía que este requiere. En cuanto al pelaje, bastará con un cepillado semanal, ya que su pelo es corto, pero si es necesario para que su bello manto jaspeado luzca suave y brillante.