En este artículo desarrollaremos toda la información sobre la boa de vizcacheras, una serpiente originaria de Argentina, Bolivia y Paraguay.
La boa de las vizcacheras también denominada en la provincia de salta como “culebrón de la tierra”, en La pampa y San Luis como “la familiar” y en aimará conocida como “lampalagua”. El nombre científico de esta especie es “Boa constrictor occidentalis”. Es un reptil que pertenece al orden squamata y su familia es la boidae.
Esta boa es de color marrón oscuro y posee figuras hexagonales que se muestran en el dorso más claras. Un ejemplar adulto de esta especie llega a medir unos 3m de largo y su peso oscila alrededor de los 15kg.
Su cuerpo es macizo, la cabeza es proporcionalmente pequeña y su cola es corta. Está cubierta de escamas, son mayores en el vientre y en el dorso pequeñas.
Esta especie se encuentra en las zonas de clima semiárido, por ello solamente la podemos hallar en Argentina, Bolivia y Paraguay.
Son reptiles de costumbres nocturnas y crepusculares. La alimentación de la boa de las vizcacheras se basa en animales de sangre caliente, como pequeños roedores y pequeñas aves, a estos los caza mediante asecho y los mata con su cuerpo, envolviéndolos y asfixiándolos.
Los pequeños de estas especies a diferencia de sus padres, presentan un tono más claro, con colores como el rojizo y el rosado. La gestación de la hembra oscila alrededor de 5 meses y por camada deposita de 15 a 40 crías. Suelen nacer durante el otoño, en los meses de marzo a mayo. Al nacer, las crías miden alrededor de 40cm de longitud.
Existen varias causas que provocan el retroceso de esta especie en su área de población: destrucción de los arbustales y bosques chaqueños para la producción del carbón, leña y postes, así también como para dar el paso a los cultivos de ocasión y a la industria ganadera; además de la actividad de la industria marroquinera que utiliza la piel de esta especie por sus pequeñas escamas y diseños atractivos.